Las diversas posiciones adoptadas por las mujeres durante el parto han sido motivo de revisión y reflexión a través de la historia. Con el progreso de la ciencia, los partos se realizan en hospitales o clínicas, con personal especializado y la mayoría de las mujeres occidentales dan a luz en la posición dorsal -de espaldas- cuya principal ventaja es el fácil acceso del agente de salud al vientre de la mujer. Quienes asisten el trabajo de parto se sienten cómodos con esta posición, en la cual normalmente reciben formación y capacitación. Es la posición de referencia para las descripciones de los libros sobre el parto vaginal, que permite al médico controlar mejor el estado del feto asegurando un parto seguro.
Primero fue el potro clásico o la mesa de parto y ahora son las camas-hiper-multifuncionales-articuladas-; se ha cambiado la tradicional forma de parir, que era móvil y vertical, por la pasiva y horizontal,-la paciente-. El fin es el mismo: controlar a la mujer, inmovilizarla para que no asuma la postura que le pida el cuerpo, para que no camine y ayude al bebé a bajar por el canal del parto, para que no domine el espacio y tome el control sobre su cuerpo.
“La propuesta con esta cama gineco obstétrica es que la cama se transforma y puede ser cama, mesa de exploración y mesa de parto: la cama adopta esas posiciones.”
Por muy innovadora que sea la cama, la mujer queda en la postura más difícil y humillante que existe, la peor para parir. Si preguntaran la opinión de las mujeres, seguramente cuestionarían la existencia de tales mesas o camas para dar a luz. Sin embargo un diseño mejorado y apropiado a las condiciones anatómicas femeninas y al proceso del parto puede ayudar y es lo que nos ocupa ahora.
El diseño de un sistema de alumbramiento, particularmente de una cama gineco-obstétrica universal, de la cual ya fue otorgada una, patente a la Universidad, ha sido lo que ocupa casi todo el tiempo, en los últimos años, del Profesor-investigador Enrique Camargo Cea. Este diseño permite que la atención médica a una paciente desde su ingreso al hospital (exploración ginecológica, trabajo de parto, parto, recuperación, puerperio) y hasta su alta médica, pueda llevarse a cabo sin trasladarla de una cama a otra.
Hasta ahora, el movimiento de las pacientes de una cama a otra las coloca en situaciones de riesgo, provocando en muchos casos accidentes y lesiones. La Cama Universal permite sustituir por lo menos siete mobiliarios de transporte y apoyo utilizados en el proceso de alumbramiento, tales como la mesa de exploración, camilla de transporte, cama de labor y mesa de partos.
La cama Universal permite, además, colocar a la paciente en seis posiciones diferentes, incluida una posición semi-vertical que favorece la contracción del útero, sinérgicamente con la fuerza de gravedad. El resultado será la disminución de los tiempos de parto, la comodidad tanto del personal de salud como de “las pacientes” y el incremento de la capacidad de las instalaciones hospitalarias para atender a un mayor número de mujeres en trabajo de parto. Entrevistamos al Maestro Enrique Camargo Cea y esto fue lo que nos contó.